La torsión uterina (es un término que significa una torsión en su eje, algo asó como atar un lazo en una bolsa de pan) ha sido reportado como una complicación no común de embarazo en gatas. Sin embargo, puede que sea más común de lo reportado. Casos reportados han sido publicados en revistas veterinarias y de criadores. Algunos de ustedes pueden que hayan tenido una experiencia personal con este desorden, o conocer alguien que lo pasado. Existe muy poca información en la literatura veterinaria concerniente a la torsión uterina en gatas. Y, por supuesto, el tratamiento recomendado es una ovariohisterectomía. Intentaré dar un resumen de la información disponible para que esperanzadamente puedas reconocer el desorden rápidamente si ocurre a una de tus hembras.
La torsión uterina ocurre durante la gestación media o tardía. Puede ocurrir a cualquier edad, ya sea que hayan tenido camadas o no, aunque los casos reportados parecen indicar que hay un riesgo mayor en hembras que ya han dado a luz a una camada. El síntoma inicial más común es una secreción en la vulva. Otros síntomas incluyen, colapso, membranas mucosas pálidas, dolor de abdomen, depresión, y anorexia. Muchos de estos síntomas con consistentes con shock. Esta es una situación de emergencia. La supervivencia de la hembra tanto como de los fetos depende de cuán rápido se diagnostica y se trata el problema. La hembra debe ser llevada inmediatamente al veterinario. Puede que muchos veterinarios nunca hayan visto este desorden en una gata, por lo cual necesitarás avisarles de la posibilidad. Se debe efectuar tratamiento de choque inmediatamente y deben realizarse imágenes de rayos-x y ultrasonido del abdomen de la gata. Se detectará un útero engrandecido. Desafortunadamente, será difícil de diferenciar una piometra de un útero lleno de sangre, de una torsión uterina con fetos. Este punto es discutible, puesto que una hembra con el cuello uterino engrandecido, y con señales de shock independientemente de la razón debe ser llevada a cirugía inmediatamente.
Aquí es donde necesitas una buena relación de trabajo con tu veterinario. Si solo uno de los cuellos uterinos se ve afectado, los gatitos que estén ubicados en el cuello que no esté torcido pueden ser capaces de sobrevivir a la anestesia y nacer normalmente. Esto requerirá que el cuello uterino afectado sea retirado y normal deberá permanecer intacto. Los gatitos que se encuentran en el cuello torcido casi siempre están muertos. El cuello uterino torcido NO debe ser puesto en su forma normal durante la cirugía ya que el flujo de sangre al tejido ha sido cortado y las toxinas del tejido muerto podrían ser sueltas en el torrente sanguíneo de la hembra. Si los gatitos ya están listos para nacer deben ser extraídos mediante una cesárea al tiempo de la cirugía. La capacidad reproductiva de una hembra valiosa puede ser salvada si se diagnostica rápidamente el problema y tu veterinario puede considerar otras opciones más que una ovariohisterectomía completa. Una hembra con un cuello uterino normal puede cargar y concebir futuros gatitos. Un caso reportado en una edición de 1996 de “The Cat Fancier's Journal” escrito por Debra Mitchell detallaba una hembra con un cuello uterino torcido a las 4 semanas de gestación y que tuvo un gatito en el cuello normal que sobrevivió a la anestesia y fue dado a luz normalmente y se convirtió en un Grand Champion de CFA! Ya que la mayoría de las hembras ya muestra señales de shock al tiempo de la detección, ocurren muertes en algunos de los casos, por lo cual es tan necesario que sea detectado rápidamente.
Existen muchas teorías sobre que causa la torsión uterina, aunque nadie lo sabe con seguridad. Los casos reportados parecen indicar un incremento en el riesgo en hembras que tienen múltiples fetos en uno de los cuellos, con ninguno o solo uno en el otro. Incremento en la actividad de la hembra, debilidad de la pared uterina, movimiento de los fetos, y manipulación ruda de la hembra han sido propuestos como posibles causas o factores. No hay forma de predecir cuando la complicación puede ocurrir. Sin embargo, la detección inmediata y el cuidado profesional incrementarán altamente el rango de supervivencia de la hembra. Lo mejor que puedes hacer es asegurarte de observar cuidadosamente a tu hembra preñada varias veces al día. Examinar su vulva, monitorear su apetito y nivel de actividad. Cualquier anormalidad debe ser tomada seriamente.
Mientras se acercaba el nacimiento de mi primera camada de persas, aprendí mucho sobre reproducción felina. Gracias a todos mis amigos criadores que me han ayudado en este camino. Siente libre de contactarme con cualquier pregunta o comentario.
Jennifer L. McAvoy, DVM
Cat Care Center
7575 Buckley Rd.
North Syracuse, NY 13212
Phone (315) 451-2273
Fax (315) 451-2958
JLMvet@aol.com
www.cnycatcare.com
www.emptynestcattery.com